EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS V, 2023

 (...)

Vas al encuentro del espacio con la letanía de la consecución del tiempo,
como quien presta lugares donde guarecerse
mientras se pasea el infierno con tanta duda ardiente,
como quien recorre la ruta del lecho perdido,
un lienzo inútil, ondeándolo como sudario.

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS V, 2023. Cerámica e hilos. Medidas 210 cm largo. Colocación: pieza instalativa.

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS VI, 2023.

Vas al encuentro de la hora infecunda que absorbió toda la eternidad,
como quien habla tierra y derrama los ecos de la ciudad,
como quien tiene sueños que no llenan las venas de urgencia
ni se registran, ni miden deseos o alaridos.
 
Vas al encuentro del espacio con la letanía de la consecución del tiempo,
como quien presta lugares donde guarecerse
mientras se pasea el infierno con tanta duda ardiente,
como quien recorre la ruta del lecho perdido,
un lienzo inútil, ondeándolo como sudario.

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS V, 2023. Cartón, cerámica e hilos. Medidas 550 x 14 x 10 cm

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS IV, 2023

 

Vas al encuentro de la hora infecunda que absorbió toda la eternidad,
como quien habla tierra y derrama los ecos de la ciudad,
como quien tiene sueños que no llenan las venas de urgencia
ni se registran, ni miden deseos o alaridos.
 
Vas al encuentro del espacio con la letanía de la consecución del tiempo,
como quien presta lugares donde guarecerse
mientras se pasea el infierno con tanta duda ardiente,
como quien recorre la ruta del lecho perdido,
un lienzo inútil, ondeándolo como sudario.

                                                                                          

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS IV, 2023. Cartón, cerámica e hilos. Medidas 48 x 18 x 17 cm

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS III, 2023

 

Vas al encuentro de la hora infecunda que absorbió toda la eternidad,
como quien habla tierra y derrama los ecos de la ciudad,
como quien tiene sueños que no llenan las venas de urgencia
ni se registran, ni miden deseos o alaridos.
 
Vas al encuentro del espacio con la letanía de la consecución del tiempo,
como quien presta lugares donde guarecerse
mientras se pasea el infierno con tanta duda ardiente,
como quien recorre la ruta del lecho perdido,
un lienzo inútil, ondeándolo como sudario.

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS III, 2023. Cartón, cerámica e hilos. Medidas 40 x 17 x 10 cm

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS I- II

Vas al encuentro de la hora infecunda que absorbió toda la eternidad,
como quien habla tierra y derrama los ecos de la ciudad,
como quien tiene sueños que no llenan las venas de urgencia
ni se registran, ni miden deseos o alaridos.
 
Vas al encuentro del espacio con la letanía de la consecución del tiempo,
como quien presta lugares donde guarecerse
mientras se pasea el infierno con tanta duda ardiente,
como quien recorre la ruta del lecho perdido,
un lienzo inútil, ondeándolo como sudario

                                                        

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS I, 2023. Cartón, cerámica e hilos. Medidas 56 x 27 x 4 cm

EL BONITO FUTURO QUE SEREMOS II, 2023. Cartón, cerámica e hilos. Medidas 50 x 15 x 5.5 cm.

MINIHOGAR. NOCHE, 2024.

HOGAR, DULCE HOGAR 

(...)Escucha la noche deglutiendo el infinito silencio estelar,

comiéndose con rencor el tiempo.

Deja atrás el sueño en la periferia infernal

de adoración mística a dioses corrompidos por un sonido roncal(....)

MINIHOGAR. NOCHE,2024. Cerámica y esmalte. 17 x 14  x 14 cm.

MINIHOGAR, JARDÍN DEL MAL I, 2024.

 HOGAR, DULCE HOGAR III

Desaparecieron. Fue suficiente.

El mar sostenía el pudor del presagio,

con un incienso mortecino, que el sol descomponía

en falsas luces de la historia.

Los campos resbalaban hacia un cielo de hormigón,

con raíces putrefactas en bosques anegados,

ahogándole la voz y la palabra.

Las agujas clavándose en los ecos de los aullidos,

con el cuerpo para coser y coserlo,

perforado a un destino líquido de innominadas.

Fue suficiente. Se recluye en la torre.

MINIHOGAR, JARDÍN DEL MAL I, 2024.  Cerámica y esmaltes. 14 X 13 X 13 cm

MINIHOHAR, ARCOIRIS II, 2024.

 HOGAR, DULCE HOGAR II

Abandona la ciudad, están con ella los lobos,

los ojos ávidos entre taludes de silencio,

concéntricos van expandiendo la huida

entre los lodos rojos que lloran los suelos.

Escucha la noche deglutiendo el infinito silencio estelar,

comiéndose con rencor el tiempo.

Deja atrás el sueño en la periferia infernal

de adoración mística a dioses corrompidos por un sonido roncal.

Secretean los lobos en lenta prosodia de un séquito que la vela,

mientras la noche que escucha pare sones

de renglones crípticos que el alba devora,

cuando el alba deja de ser un lugar para la fe.

 MINIHOHAR, ARCOIRIS  II, 2024. Cerámica y esmaltes. 12 X 11 X 12 cm.

MINIHOGAR, ARCOIRIS I, 2024

 HOGAR, DULCE HOGAR II

Abandona la ciudad, están con ella los lobos,

los ojos ávidos entre taludes de silencio,

concéntricos van expandiendo la huida

entre los lodos rojos que lloran los suelos.

Escucha la noche deglutiendo el infinito silencio estelar,

comiéndose con rencor el tiempo.

Deja atrás el sueño en la periferia infernal

de adoración mística a dioses corrompidos por un sonido roncal.

Secretean los lobos en lenta prosodia de un séquito que la vela,

mientras la noche que escucha pare sones

de renglones crípticos que el alba devora,

cuando el alba deja de ser un lugar para la fe.

HOGAR, DULCE HOGAR. MINIHOGAR, ARCOIRIS I, 2024 Cerámica y esmaltes. 14 X 13 X 10 cm

                                                                         

MINIHOGAR. ISLAS I, 2024.

 HOGAR, DULCE HOGAR I- II-III

Sale a la ciudad, están con ella los lobos,

bate un miedo íntimo en la piel.
Habla mil voces, ningún grito. Manso humo de aliento.

Viste el cuerpo de limpio,

lleva puesto todos los errores del mundo

y las venas hinchadas de urgencia.

Entra en la ciudad, los lobos danzan sus pasos,

lamen la intemperie en las encrucijadas,

olfatean los tobillos y aúllan.

Aúllan pájaros negros como cenizas sonoras,

silencios construidos como muros de regueros,

como algodones, infiernos que levantan el alba con rubor,

apariencias derramadas como ramilletes de fiebre,

como témpanos, sueños de futuro y encajes.

Aúllan a los hogares sin lechos; a llantos de lechos corrompidos,

a atrancadas entradas; a barricadas de entregas;

a los indolentes comidos de invierno tras el cristal.

Los anacoretas urden planes de huida.

Los sabios empujan la puerta entreabierta al templo,

los lobos protegiéndole, ululan una voz más que la concluye.

Un mar y un cielo se circundan en grises,

amanece, eterno, determinante.

Regresa a la torre.

MINIHOGAR. ISLAS, 2024. Cerámica y esmaltes. 12 x 12 x 10 cm

MINIHOGAR. TEMPLO I, 2024

 

HOGAR, DULCE HOGAR I- II-III

Sale a la ciudad, están con ella los lobos,

bate un miedo íntimo en la piel.
Habla mil voces, ningún grito. Manso humo de aliento.

Viste el cuerpo de limpio,

lleva puesto todos los errores del mundo

y las venas hinchadas de urgencia.

Entra en la ciudad, los lobos danzan sus pasos,

lamen la intemperie en las encrucijadas,

olfatean los tobillos y aúllan.

Aúllan pájaros negros como cenizas sonoras,

silencios construidos como muros de regueros,

como algodones, infiernos que levantan el alba con rubor,

apariencias derramadas como ramilletes de fiebre,

como témpanos, sueños de futuro y encajes.

Aúllan a los hogares sin lechos; a llantos de lechos corrompidos,

a atrancadas entradas; a barricadas de entregas;

a los indolentes comidos de invierno tras el cristal.

Los anacoretas urden planes de huida.

Los sabios empujan la puerta entreabierta al templo,

los lobos protegiéndole, ululan una voz más que la concluye.

Un mar y un cielo se circundan en grises,

amanece, eterno, determinante.

Regresa a la torre.

MINIHOGAR. TEMPLO I, 2024. 14 X 14 X 13 CM. Cerámica, esmaltes y acrílico.