miércoles, 26 de junio de 2019

LA DEVORACIÓN DEL IRIS III, 2019

LA DEVORACIÓN DEL IRIS
Volveréis con el iris devorado del que sabe la proyección del rito ofrecida con matiz de novedad,
entonces pariréis indefensos y extraños las horas alargándoos en la pregunta y
y seréis duda. Dobles. Intérpretes de otros actos.
Volveréis dándoos por otros. Explayándoos en el juego. Constriñéndoos en la derrota.
Entre tiempo y tiempo os recompondréis sublimes y viajaréis.
Viajaréis incansables a la voz para el destierro del gesto.
Seréis torre. Os distanciaréis. Volveréis en tanteo sempiterno de la respuesta.
Regresaréis ebrios de tintas azules desprendiendo esquirlas en cada viraje,
siendo los añiles abortados en un ceremonial virgen.
La fuerza de esa sombra apegada a la materia llenará hacinadas oquedades,
redoble de silentes sonidos, inmenso nido de huecos.
La eternidad no existirá mientras vosotros, obsesos, la buscaréis en cada imagen,
en todos los temblores guturales, en cada caduca posición, en cada tacto indeciso,
en agolpada memoria de sacudidas oculares.
La eternidad no existirá mientras vosotros, ilusos de inmortalidad,
la buscaréis en la parcela de un único minuto combando allí la existencia.
Regresaréis construyéndoos torre en vosotros mismos, mordaza por tormento,
ocultándoos en un lecho de verbos, estrecho ataúd de frases,
repudio de la piel y del vocablo.
Y volveréis. Volveréis al desierto con la palmas estériles,
un negro sol las plegará cegándoos la entrada.
Viviréis de la intriga como lo absoluto, desconcierto al alba corrupta,
de la residual acritud de la entrega a la nada.
Viviréis de la nada. Regresaréis a ella.
Viviréis en ella porque habéis viajado a su región.
Las oníricas noches metódicas heredarán la vigilia de la devoración de iris,
la secuencia de lo real os encontrará ausente.

LA DEVORACIÓN DEL IRIS III, 2019. Cerámica, esmaltes, tejido, pvc, alambre y malla metálica. Medida variable: extendida 36 x 124 x 37 cm