miércoles, 30 de diciembre de 2015

GILGAMESH V 2015


POEMA DE GILGAMESH (Literatura Sumeria .Versión paleobabilónica, fragmento Meissner, tablilla X)

“Gilgamesh, ¿por qué vagas de un lado para otro?
La Vida que persigues no la encontrarás jamás.
Cuando los dioses crearon la Humanidad,
asignaron la muerte para esa Humanidad,
pero ellos retuvieron entre sus manos la Vida.
En cuanto a ti, Gilgamesh, llena tu vientre,
vive alegre día y noche,
que tus vestidos sean inmaculados,
lávate la cabeza, báñate,
atiende al niño que te tome de la mano,
deleita a tu mujer, abrazada contra ti.
¡Tal es el destino de la Humanidad!”


Memoria de alquitrán fueron palabras de perfiles sentados imposibles,
futuros convexos de perímetros hilvanados sin sucesos.
Partir sin que se aprecie la fuga, levantando un haz de inviernos letales
sutilmente encadenados al rancio deseo de pervivir,
ingrávida losa en la boca de las palabras cinceladoras de unos labios casi ajenos.
Hay quien Gilgamesh. Hay quien Enkidu.
Dónde el dios? Dónde el hombre?



AL ALBA; EL SUEÑO V 2015

(...)Al alba cuando la presencia de la noche sigue formando ensueños,
llevamos el semblante semioculto, casi desaparecido,
sin pactos, un leve reconocimiento, cómplice la lasitud del gesto,
los ojos abiertos, nadie golpea entonces, ningún combate,
las pupilas perfeccionan su mirada más posesa y obsesiva,
no acechan hacia afuera, en esos instantes en que la luz toma posesión de la piel
nos reconocemos en la exclusividad de la hazaña(...)




domingo, 27 de diciembre de 2015

EVA-SHEREZADE I, 2015

Eva habitándose de manzanas, matándoos, renaciéndoos.
Eva sí. Primitiva. Ancestral. Desnuda. Tierra frágil.
Irreverente y sentenciada. Siendo demonio y fruto, exiliada al rumor, naciendo al mundo fracturada,
levitada en sílabas roncas y sonoras sin hallarse, ni que el estigma la contenga.
Eva sí. Tierra cruda en el ocaso de los últimos soles.
Su nombre desbordaba en la boca, sin fragmentos.
Pura totalidad. Vocablo absoluto. Irrompible, indómito. Tragedia pulcra.
Estigma y deseo. Llama y escarcha apátrida de futuros. Aterrado e insepulto.
Aunque sonaba incrédulo entre los dientes, la ilusión transformaba la oralidad.
Eva sí. Pecadora sin pecado.
Agotó los fonemas creándolos en renglones que cerraban pactos,
haciéndolos imagen, parada que simulaba la eternidad de lo indecible,
volcados desde la comisura a las entrañas, licuados en glóbulos y humedades,
tañedores de las regiones salvajes del alma, forasteros en los sueños.
Os fructificó con cuentos en soliloquios de lunas perdidas,
en sacudidas en la armonía de la prosodia conduciéndoos a la antesala de la ensoñación.
En las manos llevará vacías las palmas aunque sepamos que el humo tintado de añil era su dolor,
así es el color de la devoción desparramado línea a línea amalgamando el horror vacui.

Está. Estará eternamente:
en la boca apretada de lo exhaustivo.
Como culpa o deseo. Como memoria o muerte.
Cicatriz de derrota o éxito. Como secuencia pavorosa,
anécdota petrificada o historia de historias,
Como Eva del pecado.
En una posición, en un rito,
reducida a número, como intrusa o sabor sacrificial,
lejanía o espanto, en la palabra frontera, en el engaño,
en el olor del desgaste de una lenta mano,
como tinta o color de náufrago, debilidad de hachazos visuales.
En el anclaje claudicado de la frente del dolor que sobrevuela el rictus doliente,
como un Caronte remando su pathos,
como frase adolecida de otro significado, inercia sutil que desplaza la idea,
en un hechizo descompuesto por los siglos, en un taconeo de caderas.
Eva sí. Desgraciada sin pecado, como puente de dos intersticios,
como compendio de todo cromatismo que besa el negro,
en un balance de deudas, en el instante de un comienzo junto al árbol prohibido,
en la curva y la extensión gris de la búsqueda,
en la derrotada luminosidad del solsticio al equinoccio,
en la decadencia aferrada a la no renovación.
Estará. Como mujer de  hielo sin estaciones, mujer de infierno,
como Eva desterrada de los cielos, vaciadora de los anonimatos.
Está. Estará. La  hallaréis entre las pausas,
en un humo viciado, en un gesto expandido,
entre dos actos de reminiscencia antagónica.
Como la que os soñó y os derivó al horror,
como fragilidad que acogió lo inabarcable,
perseverancia eólica que no acallaba su dirección.
En la nada. Como la nada. En la mudez terminante,
en frases no engendradas. En la esquela,
en el viaje entrelazada a las pestañas.
Estará en un recuento de persistencia,
como número inconcreto,
en el aire dejará anudados los siglos bajo la densidad de un pecado sin roce,
sin trazar el fragmento de infinitos segundos que os separan,
Sí. Eva - Sherezade mágica. Tributo del hombre.
Eva otoño de alma entera, jadeando frío y avidez. Olor pomar.
Eva entonces, a veces libro, para siempre boca cerrada en vertical,
sonido desplazado a la tráquea, no fecundado.
Silente consumida. Consumación de la derrota. Eva fractura del misterio.

Eva emergerá crepúsculo. Matriarca del clan con las cuencas desheredadas de creencias.
Se compra felicidad: la carne, el coche disfraza, la casa acoge, el arte moldea.
Esfera rodando la expiración,
atadas manos a caligrafías opacas,
esa Eva  intensa, equivocadamente ilimitada,
costilla de llama lenta de pausada incandescencia.

Rebosa la boca con la tierra excavada, entonces allí la sepulten sacrílega sin infierno ni cielo,
llevándose en las vacías palmas el índigo que transmudó el significado del púrpura de las palabras,
la yemas pálidas, cerúleas, con guante silente, misterio de culpa y súplica.
Manos extendidas, cocidas en lágrimas y esfuerzo. Trémulas, retraídas,
Vacías. Sin dioses, ni brujas, ni modernos curanderos,
constructoras de la muralla de las frases, obra prolongada estéril,
puño agarrotado, bastión del latido manchado de sudor y salinidad.
Eva perdida con tatuajes indelebles del tiempo, del recuerdo.
Mujer y carne. Carne de venta.
Tardía. Desechable. Fácil. Caduca. Pretérita. Osada. Caprichosa. Puta.
Eva amoral. Eva transgresora. Eva al fin y al cabo
Estaba escrito como se expulsa del paraíso.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

EVA - SHEREZADE CUADRO I 2015

(...)Está. Estará eternamente:
en la boca apretada de lo exhaustivo.
Como culpa o deseo. Como memoria o muerte.
Cicatriz de derrota o éxito. Como secuencia pavorosa,
anécdota petrificada o historia de historias,
Como Eva del pecado.
En una posición, en un rito,
reducida a número, como intrusa o sabor sacrificial,
lejanía o espanto, en la palabra frontera, en el engaño,
en el olor del desgaste de una lenta mano,
como tinta o color de náufrago, debilidad de hachazos visuales(...)



domingo, 20 de diciembre de 2015

OJOS VELADOS CUADROS III-V- VI 2015

Cuando se lacra el iris a imágenes oníricas de viajes intensos a lugares imposibles, cruce de espera ronca y febril.

Cuando el fulgor de los nombres se arquea en una parábola de definitiva opacidad, sufriendo el destierro de la voz.

Cuando se obturan las pestañas para que los números no expandan más su carácter mortuorio y de la mirada se retrocede configurando un cauto cielo paralelo.

Cuando la luminiscencia arde los monstruos que nos vendieron las sombras y se suturan las visiones que traspasaban el alba al límite de las fronteras.

Cuando las pupilas dilatan un inamovible tiempo denso y de pestañas rizadas de pudor se huye el territorio del delirio.

Cuando de las órbitas perforadas en el registro del tiempo desecamos la acuosa mirada del furor y se hallan los ojos alambrados a la fragilidad del recuerdo en una prosodia conclusa.

Cuando de la visión de un espejo herido se evocan tramas de historias robadas vegetando el mismo final preconcebido.

Cuando de hachazos visuales se derrota la luminosidad...entonces, entonces, cegamos y zurcimos los ojos para no saber del mal.



lunes, 14 de diciembre de 2015

AL ALBA; EL SUEÑO IV 2015

(...)Al alba cuando la oscuridad va cediendo al fulgor temprano se van rellenando vacíos
con figuraciones de espacios herederos de la ilusión
y se retienen adosados al iris, al resguardo de la fragilidad del recuerdo,
impidiendo la fuga y el desánimo, venciendo con ellos la aparente quietud o desidia(...)




sábado, 12 de diciembre de 2015

OJOS VELADOS IV 2015

(...)Cuando se obturan las pestañas para que los números no expandan más su carácter mortuorio

 y de la mirada se retrocede configurando un cauto cielo paralelo(...)


jueves, 10 de diciembre de 2015

ESCOMBROS DEL MURO I - IV 2015-2016

Humanos desterrados golpeando el tiempo contra el muro,
sin girarse a la esquina donde otra voz herida ora sus vilezas,
miserias que hacen que la dicha sea la posesión de la carne.
Levantar ciegos los ojos para no ver como los otros se derraman.
Puños batiéndose contra el pecho, índices que señalan,
uñas negras carcomidas, curvadas por cómo se han reído los deseos ajenos.
Muro, tránsito eterno del purgatorio,
allí la culpa cincelada recuperará la noche
hasta que estalla irrigando todos los amaneceres.
Alguna noche, ya que el pecado existe para el regreso,
los demonios para darnos créditos de tiempo.
Resquebrajado encofrado con el que se amasó un nombre nuevo,
con sonidos que lo despueblan y descreencias que lo habitan.
Indefensa materia postrada con escombros del muro en castrados amaneceres,
la sangre no siempre vertida en rojos, escurrida en níveos regueros,
surcos corrosivos, espásticos, trazados de ímpetu y desánimo.
Fluctuando la boca por desconocer el lugar exacto dónde se guardará el nombre,
vibrando sin saber cuándo estallarán los trémulos sonidos rebotados del muro.
El eco de los sueños en qué angosta comisura se almacenará?



miércoles, 9 de diciembre de 2015

GILGAMESH III Y IV 2015

POEMA DE GILGAMESH (Literatura Sumeria .Versión paleobabilónica, fragmento Meissner, tablilla X)

“Gilgamesh, ¿por qué vagas de un lado para otro?
La Vida que persigues no la encontrarás jamás.
Cuando los dioses crearon la Humanidad,
asignaron la muerte para esa Humanidad,
pero ellos retuvieron entre sus manos la Vida.
En cuanto a ti, Gilgamesh, llena tu vientre,
vive alegre día y noche,
que tus vestidos sean inmaculados,
lávate la cabeza, báñate,
atiende al niño que te tome de la mano,
deleita a tu mujer, abrazada contra ti.
¡Tal es el destino de la Humanidad!”


Memoria de alquitrán fueron palabras de perfiles sentados imposibles,
futuros convexos de perímetros hilvanados sin sucesos.
Partir sin que se aprecie la fuga, levantando un haz de inviernos letales
sutilmente encadenados al rancio deseo de pervivir,
ingrávida losa en la boca de las palabras cinceladoras de unos labios casi ajenos.
Hay quien Gilgamesh. Hay quien Enkidu.
Dónde el dios? Dónde el hombre?






martes, 8 de diciembre de 2015

EL ESPIRAL SUEÑO DE LA MATERIA V 2015

PERNOCTANDO EL ROCE DE LA PERFECCIÓN DEL SUEÑO,
MIENTRAS ANTES SE LLEGA AL SILENCIO Y SE LE CANTA
CON LA UNDOSA VOZ QUE CAMINA EL DESIERTO,
EN UNA INEXTINGUIBLE LLAMA QUE TRASLADA UN FINGIDO MONÓTONO PAISAJE.
MECIÉNDOSE EN SONIDOS UNÍSONOS DEL ULULAR DE LA CALMA.
EN ESA PERIFERIA SONÁMBULA CIMENTÁNDOSE
DONDE LA SECUENCIA ES EL TODO DE LA NADA Y
LA NADA LA DESCOMPOSICIÓN DE LA MATERIA PLÁCIDA.
HURGANDO TÍMIDAMENTE EL PASADO TAN YERMO
PARA RESUCITAR DE UN VIENTO PROFANADO,
EN UN INFECUNDO TEMPLO GALOPADO DE OSCURAS HAZAÑAS,
DE TODAS LAS ESCARAMUZAS PERDIDAS,
DE PÚRPURAS INVIERNOS QUE HEREDAN NEGROS INVIERNOS  
HUECOS DEL DELIRIO. ROTA. AMORFA MATERIA
QUE CONTUVO EL AYER Y EL MAÑANA ATRAVESADOS POR ANÉCDOTAS.



sábado, 28 de noviembre de 2015

ACOPLAMIENTOS EN CAJAS 2015



Cuando en el vértice de una esquina languidece la indiferencia y en el otro no hay preguntas.

Cuando al alba amanecen labios agostados que no humedecen verbos y el eco ya no teje la prosodia.

Cuando las palabras se desclavan de la memoria y, de la llama, el rescoldo de la pira.

Cuando los sonidos no copulan con las frases y se eyacula el  mutismo, la voz secuestrada por lápida y mortaja.

Cuando aglomeraciones de silencios copan estrechos el aire y de las huellas los indicios son monstruos.

Cuando el nombre no eclosiona rotundo las vocales, ni sacude con la desidia de fonemas gastados.

Cuando ya no se pondera lo eterno, el vértigo se fuga  de la noche y se protege el reflejo de un espejo herido.

Cuando se intuye que  las palmas se hallarán vacías y que la pureza entorpece el aliento.

Cuando se sabe que la salinidad anegará el sueño y que nos habita un cuerpo y no un alma.

Cuando ayer fue enredado en penumbras que subían vientres hacinadores de los recuerdos, en la locura estática de un ritual elegíaco,

sombra de la palabra al agotamiento de la espera, un lento tiempo detenido.

Cuando el fuego ya no transforma la cimbreante inquietud de la atmósfera.

Cuando de lo pasado no queda apenas más que un latido y se desgaja la oscura infancia.

Cuando un intangible espacio organiza el miedo y apenas sucede más que el tiempo,

porque ya no hay dioses ni héroes que confundan infierno y magia.