jueves, 29 de noviembre de 2018

PALABRAS EXHALADAS AL OLVIDO V, 2018


Hay tierra que decrece su ritmo
y palabras rotundas preñadas de arena.
Hay una cúspide de ayeres vistiendo el rostro,
una ingrávida frente de los sueños.
Hay una incaminada ciudad recorriendo las venas,
un hueco perfecto derramándose entre las frases y la cordura.
Hay pactos de infierno viajeros de los 9 círculos,
territorios imposibles de frontera de deuda.
Hay vástagos paralelos en las esquinas de las noches,
entre las pestañas paisajes claudicados de huidas.
Hay bocas que fruncen rictus,
palabras vencidas en cómputos de noes,
laberintos de saliva ofuscados de fe,
unicornios de enfado o ira
y glosando lo indecible se repletan arcas de olvido.

PALABRAS EXHALADAS AL OLVIDO V, 2018. Cerámica, esmalte y cuerda. Medidas variables 30 x 27 x 27cm. 


martes, 27 de noviembre de 2018

MARES-ONDAS VI al VIII, 2018

Hay que haber agrietado el rostro en compases de sal y fuego,
vueltos los ojos contra la playa  en gobierno de imperios de fantasía.
Hay que haber perforado el estómago con las voces mutiladas.

Hay que haberse purificado el alma en baños de estío mientras hay quien en baño de muerte,
derramar los blancos cuerpos en un ceremonial de cinismo.
Hay que haber tenido la culpa del inane para rumiar imágenes de las pantallas.

Hay que haber volcado al alba todo el ímpetu tardío,
haber sido número y contarse en años, viajes y posesiones.
Hay que haberse deletreado en el cómputo de los pasajeros de tragedias.

Hay que haber sido mortaja y resucitar para regresar eternamente,
haberse cercenado con las ondas de fronteras de miedo,
y en el límite de cada cenit y cada descenso, profanar la pureza.

lunes, 26 de noviembre de 2018

ACOPLAMIENTO VI AL XII, 2018


(,..)Cuando ya no se pondera lo eterno, el vértigo se fuga de la noche y se protege el reflejo de un espejo herido.
Cuando se intuye que las palmas se hallarán vacías y que la pureza entorpece el aliento(...)



martes, 13 de noviembre de 2018

EL OLOR DEL TIEMPO, CAJAS I al V, 2018

Saber que irse es sin rastro ni sombra,
aunque se hubieran batallado las posiciones con rotundidad,
disputándole al camino la cordura.
Aunque se le robara al trayecto el viaje y la odisea escribiese el regreso.
Aunque se le hubiera guerreado al mar oleajes de desventura,
llevando el blanco como estandarte y el luto como desánimo.

Saber que las treguas contra el mito quedarán
abandonadas en infértiles posturas yacentes.
Que el orondo ulular de los territorios habitados
se perderá en las silentes bocas, náufragas de la palabra.
Que huérfanos serán los espejos de reflejos de vanidad,
vencidos por imágenes en santuarios profanados.

Saber del recorrido errático de destino estéril,
sin haber llegado al recodo imposible de pernoctar,
sin la ebriedad del descenso, sin pliegues, sin conclusiones,
sin que en las yemas temblasen los colores,
ni se ordenase con caos el espacio,
apenas secreteando la rutina.