viernes, 31 de enero de 2014

AL ALBA, EL SUEÑO 2014

Al alba cuando los sentidos siguen acomodándose en la semipenumbra
y la tenue luz no ciega los instantes, llevamos la frente erguida,
gravitando el ímpetu, la semivigilia no derrotada,
incrustándonos en el rostro las únicas imágenes, que,
emergidas de los sueños, atesoran destellos intangibles en retinas no vencidas,
infundiendo en la piel  la certeza del día mientras los silencios no acallan los deseos.

Al alba cuando la presencia de la noche sigue formando ensueños,
llevamos el semblante semioculto, casi desaparecido,
sin pactos, un leve reconocimiento, cómplice la lasitud del gesto,
los ojos abiertos, nadie golpea entonces, ningún combate,
las pupilas perfeccionan su mirada más posesa y obsesiva,
no acechan hacia afuera, en esos instantes en que la luz toma posesión de la piel
nos reconocemos en la exclusividad de la hazaña.

Al alba cuando la oscuridad va cediendo al fulgor temprano se han ido rellenando vacíos
con figuraciones de espacios herederos de la ilusión
y se retienen adosados al iris, al resguardo de la fragilidad del recuerdo,
impidiendo la fuga y el desánimo, venciendo con ellos la aparente quietud o desidia.

Al alba protegidos de destellos fulgurantes que revelan caos,
sin más testigos en la boca que el silencio que arranca miedos,
dejando ingobernadas las voces y desmayadas las yemas,
queremos retener eternamente lo que fue cierto y fugaz,
refugiando en las frases el término, acunando con ellas el porvenir.

Al alba, cuando apenas se distinguen las sombras de los sueños,
en el último clamor de la noche, empiezan a repicar las sinfonías del comienzo.


martes, 28 de enero de 2014

PUERTAS PARA INANNA 2014

Descenso de Inanna a los infiernos ( Literatura Sumeria)

"Entonces Ereshkigal amarró el ojo de la muerte sobre Inanna.
Mi hija anhelaba el Gran Arriba.
Inanna anhelaba el Gran Abajo.
Aquélla quien recibe los me del inframundo no regresa.
Aquélla quien va a la Ciudad Sombría allá se queda".

Partía del fin del mundo, demasiadas fronteras caminadas,
inmolando en cada límite la conciencia
porque el tiempo lo llevaba entre las yemas como el viento.
No le urgía la vida mientras era dominio del abismo,
la quietud le mudaba el concepto desviándolo a lo inapelable.
En el fin del mundo no existía la búsqueda de la sensación perdida,
tampoco inquirir al ayer si fue tan trágico,
ni si los indicios eran perfectos engaños
deviniendo esa momentánea sensación de sosiego.
Escuchaba los sonidos salpicándole la boca,
ecos intrusos de los sueños, lentamente decantándose,
esparciéndose en ese trágico fondo de infierno.
En el lugar del fin las palabras se perdieron en otras fosas,
las simas asolaron los matices
y la duda, que llegaba haciendo tiritar el instante se detuvo,
engulléndose a sí misma.


viernes, 24 de enero de 2014

RELICARIO DE LA MATERIA I 2014

Serás del olvido alimento,
del relicario la destrucción del recuerdo,
manos deshabitadas, boca repleta de olvido,
cajón de la nostalgia tus pasos.
Opaca materia que vestirá la descomposición.
Te ocupará siempre la brevedad, el repetitivo mimetismo.
Te llevarás todas las preguntas en la glotis enmudecida.
Entona ahora el carpe diem y engúllete a ti mismo.

Exigua colección ósea cosida fugazmente a la memoria de algunos

Alimento del olvido; carne de dolor ayer, polvo mañana.
Estatuarias cicatrices que serán mudez.
Viajes inamovibles, divergencias en los vértices de miradas.
Palmas desiertas, vacías yemas que mundos moraron y sangraron.
Perpetuo ulular del silencio; eternos pobladores de lo infinito.
Restos óseos de la humanidad en la caverna.
Desprendimientos de la materia que un instante aparecen anudados a la imagen.
Sujetos con débiles hilos enmarañados,
apretados nudos que ligan a la realidad
Proceso de nacimiento, agolpamiento y cenizas.
Huesos del espinazo que nos sostienen,
articulados, acoplados, cosidos a la esencia en efímero tiempo.
Vértebras del tiempo que olvido yacerán.
Casi posibilidades inagotables para el fin que a todos reúne.

miércoles, 15 de enero de 2014

CORONA I 2014


Levantad nombres que serán desmemoria,

soñad mitos y tened la opaca licencia para la hazaña,
ya que de nosotros hará certeza el olvido
cuando un mínimo renglón se anude a una oscura nube perpetua.

Cada espina; un momento, una oclusión,
un eco de silencio para cubrir el olor de la sangre en las sienes.
Cada púa; pétalos de Inanna en su séptima puerta,
interiores estiletes soportando la quietud.
Corona de agujas obstruyendo al exterior su territorio oculto y custodiado,
Cada ápice; ritmo de  victorias, batalladores indignos.
Cada vértice; esquirlas en ataúdes de frases conclusas y
pese a todo, estar.

Levantad nombres, soñad mitos.
Estad entonces con la voracidad del mañana.




jueves, 9 de enero de 2014

OJOS II 2014

OJOS II.

Cuando se lacra el iris a imágines oníricas de viajes intensos a lugares imposibles, cruce de espera ronca y febril.

Cuando el fulgor de los nombres se arquea en una parábola de definitiva opacidad, sufriendo el destierro de la voz.

Cuando se obturan las pestañas para que los números no expandan más su carácter mortuorio y de la mirada se retrocede configurando un cauto cielo paralelo.

Cuando la luminiscencia arde los monstruos que nos vendieron las sombras y se suturan las visiones que traspasaban el alba al límite de las fronteras.

Cuando las pupilas dilatan un inamovible tiempo denso y de pestañas rizadas de pudor se huye el territorio del delirio.

Cuando de las órbitas perforadas en el registro del tiempo desecamos la acuosa mirada del furor y se hallan los ojos alambrados a la fragilidad del recuerdo en una prosodia conclusa.

Cuando de la visión de un espejo herido se evocan tramas de historias robadas vegetando el mismo final preconcebido.

Cuando de hachazos visuales se derrota la luminosidad...entonces, entonces, cegamos y zurcimos los ojos para no saber del mal.

Cuando de hachazos visuales se derrota la luminosidad...entonces, entonces, cegamos y zurcimos los ojos para no saber del mal.